El estado emocional de los trabajadores se ha posicionado como un elemento crucial que impacta en el rendimiento y la productividad de una compañía.
Los constantes cambios del mercado y la implementación de nuevas tecnologías han provocado estrés e incertidumbre en los colaboradores, la cual puede desmotivarlos y provocar una baja en su productividad, para revertir esta situación, los líderes deben de implementar estrategias efectivas que les permitan mantener una inercia positiva en sus equipos, el salario emocional puede convertirse en un poderoso aliado si se gestiona de la forma correcta.
Las nuevas generaciones tienen necesidades laborales diferentes y están valorando un liderazgo más humano que les permita un crecimiento y desarrollo para sus carreras, más allá de un salario financiero, el estado emocional de los trabajadores se ha posicionado como un elemento crucial que impacta en el rendimiento y la productividad de una compañía. Una encuesta de OCC Mundial destaca que el 98% de los colaboradores considera que el salario emocional es un factor que influye en la retención de talento.
“Cuando hablamos de salario emocional nos referimos a todas aquellas acciones que reconocen al colaborador, le generan oportunidades de desarrollo, mantienen un ambiente de trabajo saludable y fomentan un equilibrio entre la vida personal y laboral, lo cual contribuye a que estén más motivados, comprometidos y se refleje en una mayor productividad”, indica Anabel Fernández, CEO y fundadora de Affor Health.
Para que el salario emocional tenga una mayor efectividad en los colaboradores, los líderes deben de tener una comunicación efectiva con sus equipos, principalmente para que sepan en qué momento se llevará acabo, cómo se aplicará y quien estará en posibilidades de recibir un beneficio extra. Esto evitará confusiones y mal entendidos y no se crea que un miembro del personal se ve más beneficiado que el resto.
¿Cómo implementarlo?
El salario emocional puede aplicarse de diferentes formas, en muchas ocasiones depende directamente del giro y el tipo de operación de cada empresa; sin embargo, hay diferentes formatos que se pueden implementar y adaptar a las necesidades del negocio, en este sentido, Affor Health propone los siguientes:
1.- Reconocimiento y aprecio: Ser reconocido y valorado por la actividad que se realiza dentro de una empresa es una acción que contribuye a mejorar las emociones del colaborador.
2.- Beneficios adicionales: Existen algunos incentivos que van más allá del salario base de un trabajador, como seguro médico, un mayor número de días vacaciones, planes de jubilación, descuentos en productos y servicios de la empresa, entre otros tópicos que favorecen a mejorar la experiencia laboral.
3.- Oportunidades de desarrollo profesional: Ofrecer opciones para el crecimiento y desarrollo dentro de la compañía, como capacitación, mentoría y posibilidades de promoción, pueden ser una forma de salario emocional.
4. Equilibrio entre vida laboral y personal: Promover políticas que faciliten a los empleados equilibrar sus responsabilidades laborales con su vida personal, para ello una empresa puede promover horarios flexibles o posibilidad de trabajar a distancia.
5. Ambiente laboral saludable: Un entorno de trabajo positivo, donde prevalezcan las buenas relaciones personales y una cultura corporativa aceptable son elementos que contribuyen al salario emocional.
Beneficios y ventajas
EL principal objetivo del salario emocional es mantener la motivación de los equipos y que por consecuencia no pierda el enfoque de sus actividades y evitar perdidas por baja productividad, así mismo podrá generar un ambiente laboral estable y de constante comunicación con los líderes. Estas son algunas de las ventajas
Reducción de estrés: lo cual se puede inhibir con el debido equilibrio entre el trabajo y la vida personal, así como un ambiente laboral saludable, previniendo trastornos como la depresión y la ansiedad.
Mayor capacidad de resiliencia: ya que cuando los empleados se sienten respaldados y valorados en su lugar de trabajo están con mejor actitud para enfrentar desafíos y superar obstáculos sin que su salud mental se vea afectada.
Satisfacción laboral: El reconocimiento y el desarrollo profesional favorecen a que los empleados satisfechos tengan una mejor salud mental, ya que son menos propensos a experimentar sentimientos de insatisfacción o desesperanza.
“Es importante precisar que el salario emocional no sustituye la importancia que tiene el salario financiero, al final del día todas las personas trabajamos para obtener ingresos y satisfacer nuestras necesidades económicas; sin embargo, las retribuciones emocionales hacen que la experiencia laboral sea más significativa y agradable para los empleados y su productividad se mantenga al alza”, finalizó Fernández.
FUENTE: El Economista