Aunque el promedio en México es de 45 horas laborales por semana, tres horas menos que el máximo legal, las empresas tendrían que incrementar sus plantillas para mantener los niveles de producción ante una reducción general de la jornada.
La reducción de la jornada laboral tendría un impacto tanto en la necesidad de personal como en los costos operativos. De acuerdo con un análisis realizado por AON, las empresas tendrían que incrementar su plantilla entre 13 y 15% para mantener los niveles de producción ante un nuevo un límite legal de 40 horas por semana por trabajador.
En su Encuesta de Compensación 2023, la firma de consultoría destaca que a nivel nacional el promedio de horas laborales efectivas es de 45 por semana. Esto significa que, en términos reales, la reducción del tiempo de trabajo sería menor a las ocho horas contempladas en la reforma que se analiza en la Cámara de Diputados, pero sí se necesitaría ampliar el número de empleados para mantener los niveles de productividad.
El análisis de la firma muestra que las regiones norte y del Bajío serían las zonas donde se tendrían que realizar más contrataciones para sostener la producción actual con menos tiempo de trabajo, esto debido a que cuentan con más actividades industriales.
Ante este contexto, la contratación de más personal para hacer frente a las necesidades del negocio con una jornada de cinco días laborales por semana representaría un incremento promedio de 12.5% en el costo de la nómina. En el caso de empresas de las zonas con mayor impacto, este podría elevarse hasta 15 por ciento.
“El impacto económico no es sencillo de calcular, tenemos categoría donde hay personal operativo con salarios muy bajos y de personal técnico más costoso. Dentro de las líneas de producción puede haber líneas automatizadas y otras muy manuales y con mucha gente. Estos datos son sólo para ir calentando motores y ver los escenarios de impacto económico”, expuso Rocío Hernández, directora de Consultoría en Talento y Compensación de AON México.
En abril de este año, en comisiones de la Cámara de Diputados se aprobó un dictamen para reformar la Constitución y establecer una jornada laboral de cinco días de trabajo y dos días de descanso, lo que se traduciría en un límite máximo de 40 horas laborales por semana.
El proyecto todavía no se ha discutido en el pleno, pero la Cámara Baja realizará un parlamento abierto para abordar los impactos y alcances de esta modificación a la Carta Magna.
En nuestro país, la jornada de trabajo no se ha modificado en más de 100 años, y pese a que a nivel regional el límite legal de 48 horas semanales es la norma general, países como Chile y Colombia han avanzado en los últimos años con importantes reformas en la materia, acercándose más a la realidad europea.
La otra propuesta regulatoria analizada por AON en su encuesta de compensación es el incremento del aguinaldo de 15 a 30 días como mínimo. De acuerdo con el sondeo de la firma, el 63% de las grandes empresas ya cuenta con un aguinaldo equivalente a un mes de trabajo, por lo que una modificación legal en esta materia no tendría un impacto mayor.
“La mayoría no tendría una afectación por esta norma porque ya lo pagan; les afectaría si quieren mantener la prestación superior a la Ley”, subrayó Rocío Hernández.
Sin embargo, estas cifras corresponden a personal no sindicalizado. En el caso de la fuerza laboral afiliada a una organización gremial, el 64% de las empresas tiene un aguinaldo inferior a los 30 días. “Aquí en personal sindicalizado estamos al revés y sólo el 36% de las empresas libraría la reforma, el restó sí tendrían un impacto económico”, señaló la especialista.
Renuncias de personal, al alza
Entre las tendencias observadas en el mercado, la encuesta de AON destaca un crecimiento en el número de renuncias. En 2022, las salidas voluntarias de los trabajadores representaron el 47% de la rotación total; este año, equivalen al 52 por ciento.
“Las salidas voluntarias se están elevando. Se destapó la caja de pandora”, dijo Martha Hernández, directora de Consultoría en Capital Humano de AON México. En industrias como la de alimentos, las renuncias llegan a representar casi el 80% de toda la rotación de personal.
El salario, de acuerdo con el reporte, es la principal causa de salidas voluntarias tanto para empleados con afiliación sindical como para quienes no tienen representación gremial. Y en ambos casos, el liderazgo es la segunda razón para irse de una empresa.
“Si tienes un salario competitivo, todo lo demás brillará. Si quieres sopesar con otras prácticas el salario que desde hace tiempo, y en México no es sorpresa, tiene un rezago por temas de inflación e indicadores económicos, será complicado que posiciones el resto de la oferta de valor”, subrayó la especialista.
FUENTE: El Economista